Almagato se utiliza para el alivio y tratamiento sintomático de la acidez y el ardor de estómago en adultos y mayores de 12 años. Está contraindicado en personas con hipersensibilidad, enfermedad de Alzheimer, hemorragia gastrointestinal o rectal sin diagnosticar, hemorroides, edema, toxemia gravídica y diarrea. No se debe administrar a niños menores de 12 años y se requiere precaución en personas con insuficiencia renal grave, ancianos e hipofosfatemia. Puede interactuar disminuyendo la absorción de algunos medicamentos como AINEs, antiulcerosos, digitálicos, entre otros, por lo que se recomienda administrar 2-3 horas después de otros fármacos. Las reacciones adversas pueden incluir diarrea leve y transitoria. En embarazadas, la administración de antiácidos se considera segura si no se usan de forma prolongada o en dosis altas, y se ha asociado a casos aislados de alteraciones en los niveles de calcio y magnesio. Durante la lactancia, aunque pequeñas cantidades de aluminio y magnesio pueden excretarse en la leche, no se espera que produzcan efectos adversos significativos en el lactante, pero se debe evitar el uso crónico y/o excesivo.