Amlodipino se utiliza para tratar la hipertensión arterial esencial y la angina de pecho, ya sea vasoespástica o estable crónica. Su mecanismo de acción implica la inhibición del flujo de calcio hacia el músculo liso vascular y cardíaco, lo que ayuda a relajar los vasos sanguíneos y mejorar el flujo sanguíneo. Entre las reacciones adversas más comunes se encuentran el dolor de cabeza, somnolencia, mareo, fatiga, y edema en tobillos. Se recomienda precaución en pacientes con insuficiencia hepática o renal. No debe ser utilizado en niños menores de 6 años. Durante el embarazo, amlodipino solo debe utilizarse si los beneficios superan claramente los riesgos, y se aconseja detener la lactancia mientras se esté en tratamiento.