Senósidos A-B se utilizan para tratar el estreñimiento tanto sintomático como temporal y para facilitar la evacuación en casos de hemorroides y fisura anal. También se emplean para el vaciado del colon y recto antes de ciertos exámenes médicos del tracto gastrointestinal y del colon. Durante el embarazo se desaconseja su uso en el primer y tercer trimestre; durante la lactancia no se recomienda debido a la excreción de metabolitos activos en la leche materna. El uso prolongado puede causar dependencia y desequilibrios en el metabolismo hídrico y electrolítico, especialmente en personas mayores. Las personas con enfermedades graves del hígado o que presentan ciertos problemas digestivos, como enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa, no deben usar este medicamento. Podría interactuar negativamente con varios otros medicamentos, por lo que es fundamental tener precaución con las combinaciones. Los efectos secundarios más comunes incluyen dolores abdominales, náuseas y diarrea.