Dexrazoxano se utiliza para prevenir la cardiotoxicidad crónica acumulativa causada por el uso de antraciclinas como doxorubicina o epirubicina en pacientes con cáncer de mama avanzado y/o metastásico que han recibido altas dosis acumulativas de estas drogas y necesitan tratamiento adicional. También se utiliza para tratar la extravasación de antraciclinas, que ocurre cuando el medicamento se filtra fuera de la vena hacia los tejidos circundantes. Durante el embarazo, los estudios en animales han mostrado efectos negativos, y no debe usarse a menos que sea absolutamente necesario; en la lactancia, se debe evitar ya que puede causar reacciones graves en el lactante. Los efectos secundarios más comunes incluyen anemia, disminución de glóbulos blancos, náuseas, vómitos y fatiga. Precaución en pacientes con insuficiencia renal o hepática, ya que puede ser necesario ajustar la dosis. Es importante usar métodos anticonceptivos durante el tratamiento y tres meses después en el caso de los hombres. También se recomienda monitoreo cardíaco continuo al usarlo junto con quimioterapia.